Esto se llama ser una gordita tentada. Yo sabía que no iba a tener comensales, pero la hice igual. El domingo estuve con una amiga que me contó que la había hecho, y el lunes tomé manos en el asunto 🙈. Para este Rogel que se hace en un ratito (más los ratitos que tenés que esperar para que se enfríen las tapas), necesitás:
🔻 5 tapas de empanadas.
🔻Dulce de leche (el que más te guste. Para mi es clave que sea rico y no repostero).
🔻2 claras.
🔻100 grs. De azúcar.
Amasás las tapas hasta que queden bien finitas (no importa que no sea redondo, redondo); y las vas poniendo una por una en el horno hasta que queden crocantes. Se hacen a mil así que 👁 que no se quemen. Dejás enfriar y, mientras tanto vas haciendo el merengue. Esta vuelta puse las 2 claras y el azúcar en una cacerola y las puse un ratito en el fuego, hasta que se deshicieron las claras y se unieron con el azúcar. (Si probás, no tiene que quemar la mezcla cuando la tocás). La saqué del fuego y lo batí hasta lograr consistencia merengue (sin ver ni escuchar los granos de azúcar). Con las masas frías, vas alternando con dulce de leche (la cantidad que quieras), despacio para que no se quiebren. Y el merengue lo ponés en el último piso!
Charáaaaan! Parece comprado 👌. Si querés que sea más alto, le sumás más tapas de empanadas.
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