Otra vez torta




A pedido del público, hago un reposteo de la famosa torta de nuez, que quedó muy abajo en el blog y seguramente muchos lectores no alcanzaron a ver. Debe haber muchas mujeres con niños en sus casas y con ganas de buscar nuevas recetas para combatir los días adentro de casa y este frío polarrrr.

¡Que tengan un buen fin de semana! Nosotros nos escapamos hoy dos días a visitar a primos, tíos y bisabuelos a unos kilómetros de distancia de casa.


Torta Micha- Mechi (para mi es la torta de nuez)

(Prender el horno! Consejo de mi amiga Sebas: prender el horno 20 minutos antes de meter cualquier preparación o cuando empezamos a cocinar).

5 galletitas tipo Lincoln (pueden ser Manón, Vocación, Coquitas, o las que les gusten de este estilo. Esta vuelta la hice con unas Lincoln de coco, que fueron las únicas que encontré en el almacén en frente del Jardín de Mila)
100 grs de nueces picadas
4 claras
230 grs de azúcar
1/2 kilo dulce de leche repostero
Crema batida (cantidad necesaria)

Procesar las galletitas y mezclar con las nueces picadas.



Por otro lado, hacer un merengue con las claras y el azúcar y una vez que se armen picos, mezclar con lo anterior.





Poner todo en un molde redondo de torta (yo usé uno de 26 cm de diámetro), sobre el cual antes ponés papel manteca (por experiencia, es la única manera que el merengue no se pegotea en los bordes y después lo podés desmoldar muy bien). 





Meter en el horno (muy bajo) entre 20 y 30 minutos (yo lo suelo sacar cuando se arma una capita más dura arriba e incluso algunos bordes ya cambian de color).




Dejar enfriar (esta vuelta la dejé en la heladera un día entero porque necesitaba seguir cocinando las otras tortas y me pareció más rica todavía. Siempre tapada con film así no agarra olor a heladera).


Sobre la preparación poner el dulce de leche repostero. Es verdad que el repostero no siempre es el más rico, pero el otro se sale de los bordes en pocas horas y no queda lindo. Otro consejo de mi amiga chef: usar el repostero de Ilolay o de La Paulina, que casi no parecen reposteros.






Batir la crema y poner sobre la preparación. Si te quedaron más nueces, picalas un poco y las tirás encima. ¡Es una deliciaaaaa! Nunca queda ni un pedazo en el plato cuando la hago en casa. La clave, para mi, es hacer un rico merengue y no pasarse con el horno, así queda una masa entre húmeda y crocante (si tengo que elegir, prefiero que me falte un poquito de horno y no al revés, pero esos son gustos).






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POR QUÉ ESCRIBO

POR QUÉ ESCRIBO
Porque hace bien al Alma. Porque sana. Porque me ayuda a no olvidar. Porque me ayuda a recordar. Porque a veces la gente no encuentra el orden exacto de las palabras y yo sí. Porque no siempre sé decir en voz alta. Porque me deja volar un rato y salirme del día a día. Porque algún día mis hijas van a aprender a leer. Y otro día, a escribir. Y van a ser ellas las voces detrás de este teclado y los ojos que van a mirar lo que yo algún día vi.

DETRÁS DEL LENTE

DETRÁS DEL LENTE
Todas las fotos que ven en mi blog las saco yo. Muchas las saqué con mi Cannon G10, máquina que amé y sigo amando, pero ¡ya llegó a su máximo de cliks! Me acompañó desde 2009 hasta el año pasado, que pidió un cambio. Viajó por Tailandia y por Chile; disfrutó de los mejores veranos en la playa en familia; fue testigo de nuestros miles de kilómetros en moto; nos acompañó bajando montañas de nieve; pudo ver cómo nuestra vida en el campo se fue transformando día a día; vio crecer a nuestros perros; retrató las primeras sonrisas de mis hijas. En 2015 pidió un cambio así que, por esas cosas que tiene el azar, Tere, mi íntima amiga, me vendió su Nikon 3500. Todavía no le tengo el aprecio que le tuve a la Cannon (siempre recomendaría esta máquina porque es semi profesional. Me sirvió mucho para vender fotos en las notas que me han publicado). Las demás fotos las saco (y saqué) con el Iphone 6.

ALGO DE MI

ALGO DE MI
Soy una mezcla de todo. Fui charlista de cenáculos, atleta federada, secretaria ejecutiva. Recorrí más de 5.000 kilómetros en moto por el mundo y saqué cientos de fotos desde el asiento de atrás. Caminé con górilas en Ruanda y fui pasante en Para Tí. Viví algunos días en el monte formoseño y otros tanto, en la clínica La Prairie. Soy periodista de profesión, y comunicadora, de vocación. Leí la saga completa de Harry Potter y nunca entendí a Cortázar. Tengo una huerta en mi casa y me gusta cocinar. Soy amiga, esposa, hija, hermana y madre dos niñas que me dieron vuelta el mundo. Tengo 34 años y sigo usando All Stars.