¡Buen día de lunes para todos! Parece que está llegando el otoño, finalmente... Esperemos que este fresquito se anime a ir desarmando las tormentas de todo el país y darle alivio a tanta gente que la está pasando tan mal con la lluvia.
Por estos pagos, ya arrancaron las mañanas obligadas de medias y mangas largas. Ni qué hablar de lo difícil que se hace salir de entre las sábanas con la nariz semi congelada... La chimenea acaba de quedar formalmente preparada para ser prendida en cualquier momento (el Pesebre, sí, el Pesebre, seguía ahí firme, como esperando que llegara la fresca para treparse a la caja hasta la próxima Navidad. Se acabaron las visitas guiadas al living "para ver cómo sigue Jesusito". Al fin).
El texto lo escribí cuando Mila acababa de empezar a caminar, pero podría ser Tania o cualquier otra personita que está en esa etapa. La ilustración tardó en llegar, pero terminó quedando lindísima, y Wonky se animó a jugar con texturas, collage, tinta china y acuarelas y con una foto que le saqué a Tania en febrero pasado.
Les deseo una linda semana y, como dice el texto, que ¡vayan sin miedo, como cuando aprendemos a caminar!
DE FRENTE MANTECA
Ella ya camina. Va, viene, se cae. Se tropieza, se vuelve a levantar, se vuelve a
caer, se agarra de un mueble y se levanta una vez más. Da dos pasos y vuelve a tropezar. Sigue gateando un poco. Y llega. Con la ropa húmeda, con la cara negra, con las manos sucias y sus cuatro dientes que asoman. Sigue gateando un poco. Y llega. Ella ya sabe que puede llegar adonde sea con sus dos piernas y sus dos bracitos que la ayudan a levantarse siempre. Y va sin miedo. Cada vez que se cae, la miro y pienso: “Ahora se va a quedar en el piso y va a esperar a que yo la levante”. Pero me equivoco. Ni siquiera mira hacia atrás. Como si esa caída fuera parte de
su andar. Es que ellos saben, más que nadie, que un tropezón no es caída. Y que para llegar adonde uno quiere, no siempre sirve mirar hacia atrás.
Tania y Kala, nuestra perra que nació dos meses más tarde que la chiquita de rulos que, desde que sabe caminar, no la para nadie. Wonky se inspiró en esta foto para la ilustración del texto. |
0 comentarios :
Publicar un comentario